Pilanderas y Morisquetas marcan el ritmo de las danzas momposinas

Guaches, flautas de millo, gaitas, tamboras y maracones acompañan el rechinar de los machetes que marcan el paso en los ancestrales bailes de Mompox, que recrean el diario vivir de la alguna vez esclavizada población afrodescendiente del país.

‘Don Abundio y sus traviesos’, grupo de Samuel Mármol, ha representado el foloclore de esta tierra en el Smithsonian Folklife Festival celebrado en Washinton D.C., Estados Unidos. |Foto: Festival Nuestra Música|.

La ‘danza del negro’, ‘danza de coyongo’ o ‘la pilandera’ son algunos de los bailes tradicionales que se conservan gracias a la dedicación de cultores como Samuel Mármol, director de la reconocida agrupación ‘Don Abundio y sus traviesos’.

Por más de 40 años, este grupo de bailarines de diversas edades, ha sido sinónimo de cultura, folclor, fiesta e historia para el municipio de Mompox y para todo el país, pues es tal el talento de sus integrantes que ya hace parte del repertorio tradicional del Carnaval de Barranquilla y además, fue escogida para representar a Colombia en el Smithsonian Folklife Festival celebrado en Washinton D.C., Estados Unidos, para mostrar la cara amable de la nación.

“Para nosotros fue todo un motivo de orgullo hacer remembranza de las tradiciones de nuestros ancestros a través de la música y el baile en el exterior. Buscamos ser ejemplo para todos los países y para el resto de Colombia porque amamos nuestro folclor, lo llevamos en la sangre, y por eso por tantos años hemos querido transmitirlo al público de todas las generaciones”, afirma Samuel Mármol.

Entre las manifestaciones artísticas que se presentaron en la tarima de la capital norteamericana están ‘Las Pilanderas’, donde los hombres se visten de mujer como parte de una antigua tradición para proteger a sus mujeres; ‘Las Morisquetas’, donde se recrea una especie de trance compulsivo y salvaje que parece remitir a antiguos ritos en estados alterados de conciencia, y la ‘danza del negro’, que “cuenta cuando el esclavo se libera del español y se va a los palenques a formar su tribu; se dedica a la caza, la agricultura, la pesca y se iba al monte a “machetear”. En la danza recordamos ese diario vivir del recién liberado”, comenta Mármol.
AUTOR: Ingrid marcela solarte de la hoz.